Cartas a la Dra. Isabel: Mensajes y consejos de El Ángel de la Radio

Cartas a la Dra. Isabel: Mensajes y consejos de El Ángel de la Radio

by Isabel Gomez-Bassols
Cartas a la Dra. Isabel: Mensajes y consejos de El Ángel de la Radio

Cartas a la Dra. Isabel: Mensajes y consejos de El Ángel de la Radio

by Isabel Gomez-Bassols

eBook

$11.99 

Available on Compatible NOOK Devices and the free NOOK Apps.
WANT A NOOK?  Explore Now

Related collections and offers


Overview

Descubre las valiosas enseñanzas de vida de El Ángel de la Radio a través de sus respuestas a las conmovedoras cartas que ha recibido a lo largo de su carrera


Escribir acerca de nuestras dudas, nuestros temores, nuestros problemas no es solo estrechar la mano pidiendo ayuda, sino que es una manera de comenzar a enfrentar lo que nos pasa. Es una forma de ponerse cara a cara con la verdad y empezar a ordenar nuestras vidas enfrentando lo que nos aqueja.

Cartas a la Dra. Isabel es un homenaje a todos sus queridos oyentes y seguidores que le han escrito buscando consejo en temas como:

• conflictos de pareja
• relaciones familiares
• sexualidad
• problemas de salud mental

Con su incomparable sabiduría y candidez, la Dra. Isabel brinda respuestas a todos los pedidos de sus seguidores, ayudándolos a comenzar ese cambio tan necesario en sus vidas. Recibe las enseñanzas de la Dra. Isabel en cada una de sus réplicas, y siente su más tierno abrazo a la distancia, dándote fuerza para emprender tu nuevo futuro.

Product Details

ISBN-13: 9780698182851
Publisher: Penguin Publishing Group
Publication date: 06/03/2014
Sold by: Penguin Group
Format: eBook
Pages: 256
File size: 2 MB
Age Range: 18 Years
Language: Spanish

Read an Excerpt

Inquietudes y problemas de pareja
Mujer atada a matrimonio tóxico

Hola:

Me llamo Alma y estoy buscando un consejo desesperadamente, pues no sé lo que tengo que hacer. Estoy casada, pero no estoy feliz en el matrimonio. Siempre me estoy yendo, pero siempre regreso, y sé que una y otra vez me iré, pero regresaré. Estoy con él desde mis dieciocho años. Ahora tengo veinticuatro y estoy cansada. No lo amo y creo que solo estoy con él porque estoy acostumbrada. Cuando me voy, se vuelve como un loco, me lo quita todo, y estoy cansada de él y de su familia. Como estoy tan infeliz, uso drogas; para decir la verdad, estoy muy deprimida. Por favor, ayúdame.

Hola Alma:

Hay muchas cosas que quiero que pienses. Una, si eres infeliz, tienes que buscar una solución para ti, una solución que te provea independencia. Eso quiere decir que puedas salir de la droga a la que te has acostumbrado, que puedas mantenerte económicamente; eso quiere decir que puedas trabajar responsablemente.

La razón por la que te vas y regresas, es porque piensas que al irte lo estás castigando, e inclusive estás buscando en él esa reacción apasionada, pues eso te atrae, y además regresas pues no tienes cómo mantenerte.

No sé si has estado deprimida por mucho tiempo. Muchas veces las personas buscan en las drogas ilícitas una manera de calmar o levantar su ánimo. Es importante que puedas participar en un programa de drogadicción que combine, primero el ayudarte a dejar la droga, y después, cómo manejar tus emociones. Lo principal es entrar en un programa que te ayude a manejar estos dos aspectos de tu recuperación. Los programas de Narcóticos Anónimos pueden ser un buen comienzo para ti, aunque preferiblemente necesitas un programa residencial, donde se ocupan de tus estados emocionales y tus adicciones.

Llama con confianza al National Drug Information and Referral hotline: 1-800-662-4357, opción 2 para español. Ellos te pueden indicar de qué manera pueden ayudarte.

Por supuesto hay hospitales que se ocupan de estos casos. Llevas mucho tiempo luchando con esto pues desde los dieciocho años estás dando vueltas, sin prepararte para tu futuro. Sí puedes vencer esto, pero tienes que comenzar por buscar la ayuda principal. Una vez que entres en recuperación, te indicarán, de acuerdo a tu condición, cuándo puedes comenzar a estudiar y trabajar. Sí puedes cambiar tu vida, tomando control de la misma.

Doctora Isabel

Mujer enamorada de otra mujer

Querida doctora Isabel:

Me ha dado mucha alegría haber encontrado esta página donde usted podría ayudarme con sus consejos los cuales deseo que lleguen pues debo contarle que soy una mujer casada y tengo dos niños. Llevo casi diecinueve años de matrimonio y ahora en mi trabajo algo me pasó, algo que jamás pude imaginarme y que, como a todo ser, una vez algo nos puede pasar por la mente como una fantasía pero esta fantasía se ha hecho realidad.

Tengo miedo pero al mismo tiempo siento que vivo y que soy otra, me he enamorado de una muchacha que, al igual, ella siente lo mismo por mí. Hemos hecho el amor muchas veces, nos vemos casi siempre y la amo, la quiero la deseo y la extraño y ya no me siento bien haciendo el amor con mi esposo. Solo a ella la necesito y a ella su novio la dejó porque con él era fría y desganada. Al contrario conmigo, ella me busca y yo a ella, ya no podemos estar la una sin la otra.

Llegó el momento de dejar mi trabajo, y creo que eso hará que nos alejemos por circunstancias de esta vida y yo estoy mal y sufriendo al igual que ella. Doctora por favor, dígame qué hacer, si las dos nos llevamos tan bien en todos los sentidos, y en la cama somos maravillosas y quedamos tan satisfechas que nos gusta, y en una día nos entregamos tanto como nunca pensé que se pudiera hacer así el amor con tanto gozo placer y deseo.

Atentamente y en espera de su respuesta. Gracias y mucha salud para usted.

Estimada lectora:

Tenemos que mirar dos ángulos para responder esta carta. Primero, el ángulo del matrimonio, el compromiso tuyo con tu marido. Es obvio que es mejor que le digas que ya no lo amas, y que honestamente es mejor que lo dejes... Es obvio que a la mujer de la que te has enamorado tampoco le interesa su compañero y por eso la dejó. Tenemos que hacernos muchas preguntas ¿Sabes lo que quieres en tu vida sexual y personal? ¿Quieres un hombre o una mujer? Me parece que has estado escondida en el clóset, y has salido ahora. Creo que debes ir despacio con esta relación. No será fácil para los hijos entender, aunque hoy en día, con intervención, llegan a entenderlo aunque eso no quiere decir que no haya dolor y trauma envuelto en esta realidad. De que no puedes vivir engañando a tu compañero, estoy segura. La comunicación de la ruptura y cómo comunicar tu realidad sexual, eso es algo que tienes que saber cómo hacerlo.

Ahora, el segundo plano a analizar es más sencillo. Yo creo que ustedes no deben trabajar juntas. Es más, llevar una relación clandestina puede que les ocasione problemas en el trabajo. Si es una relación verdadera, no necesitan trabajar juntas para seguir de manera estable.

Ahora, sí te digo que no pretendas continuar una relación con ella y con tu esposo, pues eso ni es sano ni justo para él ni tu familia. No puedes jugar en los dos bandos, tienes que ser sincera contigo misma y por supuesto con tu esposo.

Te deseo luz para tomar la decisión correcta.

Doctora Isabel

Mujer abusada emocionalmente

Doctora:

La quiero felicitar por su estupendo programa. Tengo dos meses escuchándola y sus consejos me están sirviendo de mucha ayuda en este momento difícil de mi vida. Me gustaría que hiciera un tema referente al castigo del silencio, mejor conocido en inglés como el “silent treatment”. Tengo curiosidad por saber qué es lo que pasa por la mente de la persona que ofrece este castigo, ¿están conscientes del daño que están haciendo, o simplemente son unos estúpidos que no saben valorar a su mujer?

Desafortunadamente este es mi caso. Tengo diecisiete años viviendo de esta manera y estoy bien consciente de que estoy en la última etapa de mi matrimonio. Soy la persona que ha recibido este tratamiento pero mi paciencia con este hombre está llegando a su final.

Él es un hombre que adora a sus dos hijos y les da muchísimo tiempo y conversa mucho con ellos, y también es muy social con todas las personas y siempre está hablando por teléfono, esa es mi frustración, porque nada más conmigo se porta así.

Querida amiga:

El llamado “silent treatment” es una forma de abuso emocional. Es obvio que él no es ni sordo ni mudo. Ha escogido castigarte a ti como una forma para intentar dominarte, pues este tipo de trato es para controlar a la otra persona, que en este caso eres tú.

Me preguntas qué pasa por su mente, y eso es fácil de contestar. Él te ha estado doblegando con su comportamiento pues en el caso tuyo, siendo mujer, seguro has hecho lo que fuera necesario para poder conseguir una comunicación, y de seguro él se siente como un gallito, pues ha logrado mantenerte confundida con su comportamiento ya que a sus hijos les habla, a los amigos también, sin embargo a ti te ignora.

¿Qué es lo que piensa? ¿Que te venció?

Lo importante de esto es saber qué es lo que está pasando por tu cabeza, ya que esa situación afecta una parte del cerebro que detecta el sentimiento de sentirse solo, abandonado y aislado, (córtex del cíngulo anterior o “anterior cingulate cortex” en inglés) causando un dolor físico. Al ignorarte, te está causando un dolor profundo. Este comportamiento en un matrimonio es muy destructivo, pues el mensaje que te está enviando es que tú no vales, ni tus impresiones u opiniones tampoco. Eso te hace sentir que no perteneces a ese grupo familiar; por supuesto que tu autoestima debe estar por los suelos.

Por la forma de expresarte, sé que eres una mujer inteligente. ¿Pero, me pregunto cómo has podido aguantar esto? ¿Por amor a tus hijos, o es por temor a que sea cierto lo que él cree de ti? Tú vales mucho para seguir siendo sometida a este abuso. Diecisiete años es demasiado tiempo. También recuerda que las lecciones que les estás dando a tus hijos de lo que es un matrimonio no son saludables.

Mi recomendación es que vayas primero a buscar ayuda sicológica, o asiste a los programas de CoDA (Co-Dependents Anonymous). Encontrarás que te va ayudar a levantar tu autoestima, y a poder saber cuándo tienes que salir de esta relación tóxica y abusiva.

Hoy es tú día... ¡cambia!

Doctora Isabel

¿Lo perdono o no?

Hola Dra. Isabel:

Me da mucho gusto que haya tomado el tiempo de leer mi correo electrónico. Paso a darle más detalles de mi caso. Para empezar, yo tengo un carácter muy fuerte. No me puedo contener y exploto muy pronto, esa es mi reacción. Yo me junté a vivir con mi ahora esposo cuando yo tenía diecisiete años y él dieciocho años. Ahora yo voy a cumplir treinta y dos años y él treinta y tres. Tenemos a Netito de doce años, Gabrielita de ocho años y mi bebe de cuatro meses. Hemos pasado por muchas cosas malas y también buenas. Él es alcohólico. Hace cinco años él tuvo que salir del país. Cuando él salió del país andaba tomando mucho. Y estando en México su mamá lo internó en un centro de rehabilitación, en el cual duró tres meses, y desde entonces, gracias a Dios, ha estado sin alcohol.

El caso es que él dura en México un año para regresar aquí con nosotros. Todo estaba muy bien, yo diría que como yo hubiera deseado, todo bien como pareja para papá. Entonces, en junio de 2012 decidimos casarnos por la iglesia y todo bien. Dos meses después de que nos casamos, el empezó a decir que no estábamos bien, y yo le preguntaba por qué dices que no estamos bien, dame una razón, o dime en dónde no estamos bien para yo saber y tratar de cambiar en donde yo estoy mal. Pero de ahí yo no sacaba entonces.

Un día tuvimos una fuerte discusión por teléfono y cuando yo llego del trabajo, su cuñado ya había ido a la casa y había sacado sus cosas. En ese entonces, yo tenía siete meses de embarazo, pero él siguió pendiente de mis hijos y de mí. Llegó el día de dar a luz y él ahí estuvo conmigo. Cuando ya regresé a casa del hospital, pues él estaba ahí. Después decidió salir de la casa otra vez y esta vez me decía que él era un cabrón y que a veces las cosas que uno hace tienen consecuencias: “Tú eres buena y no te merezco”. Bueno, bueno el caso es que la semana pasada le saqué la verdad y me dijo que durante el tiempo que él estuvo en México embarazó a una mujer y que ya no aguantaba más.

Doctora, mi pregunta es ¿lo perdono o no lo perdono?

Hola amiga:

En estos momentos mi preocupación no es el que puedas o no perdonarlo. Es mi opinión que sí, y después el olvidar lo que ha hecho es un trabajo que solo lo puedes llevar un día a la vez.

Mi preocupación es si él está arrepentido de lo que hizo, y si quiere seguir contigo y no con la otra. También tienen que hablar de cuál responsabilidad va a tener con el otro bebe. Definitivamente tienen que hablar bien claro sobre la determinación que él va a tomar.

Sé que me dices que él fue a un centro de rehabilitación. Eso no quiere decir que él se curó, sino que se rehabilitó. Él necesita continuar asistiendo a Alcohólicos Anónimos, y así poder hacer lo que realmente tiene que hacer. Además, te recomiendo que asistas a Al-Anón, un programa para los familiares que conviven con un alcohólico.

Sé que no es algo que puedas arreglar en un día, pero es obvio que él respondió con responsabilidad durante tu embarazo.

La pregunta es si quiere seguir contigo fielmente o no.

Doctora Isabel

¿Tú me hiciste brujería?

Doctora Isabel:

Necesito platicar con alguien que me dé un buen consejo. Soy mexicana, pero un amor me llevó a Cuba. Lo conocí por Internet. Primero fue solo un amigo, después establecimos una relación que cambió mi vida.

Hacía malabares para tener comunicación, eso me agradaba. Mi mamá fue cómplice; a mi padre le costaba creerlo. Yo lo defendía porque estaba segura.

Después de casi un año me animé a ir a Cuba. Cuando lo vi me sentí emocionada. Siempre me respetó, jamás abusó de que estuviéramos solos. Durante una temporada que pasé en La Habana intercambiamos más, elogiaba mis principios y me propuso matrimonio. Regresé con esa idea a México, le prometí volver. Mi familia se cambió de ciudad y mis planes se truncaron. Él comenzó a creer que estaba poniendo trabas para no casarnos. En el segundo aniversario habló con mi madre para romper la relación. Yo me opuse, pero finalmente terminamos.

En un viaje de vuelta a Cuba me reencontré con su familia y un matrimonio amigo al que no le agradé. Pienso que influenciaron para separarnos porque la señora practica magia negra. Intentamos volver, pero él se dejó llevar por consejos. No nos hemos vuelto a ver, pero mi corazón no se resigna. Siento que nunca he sido feliz, excepto cuando estuve a su lado. Me duele pensar que pudo ganar el mal sobre el bien, ¿Qué me recomienda?

Me han dicho que busque a otra persona, pero siempre que intento, mis valores pesan más, porque así fui educada. Sé que es mucho pedir, pero me hace falta.

Agradeceré sus consejos.

Amiga mía:

Esta carta me hizo recordar una canción que dice “tú me hiciste brujería”. Te enamoraste de alguien que de una ilusión alimentada por cartas y conversaciones telefónicas creíste real. Me dices que era un caballero, y me pregunto ¿qué quieres decir? No sé si tuviste intimidad con él, quizás a él no le interesaba. Me parece que vivía una fantasía contigo, la alimentaba, o sería que estaba buscando salir de Cuba. Sé que son conclusiones drásticas, pero muchas han sido las historias parecidas a la tuya. Lo que no tiene sentido es que una persona con la educación que dices que él tiene, se deje dominar por la brujería. Puede que tuviese inteligencia cognitiva, pero también periodos de debilidad mental que lo llevan a buscar respuestas inconsistentes. Esto no significa que el mal le ganó al bien.

Una persona balanceada no busca soluciones a su vida en la brujería. ¿Te habría gustado llevar la vida con alguien que cuando se presenta un problema encuentra en eso su refugio? Reconozco en ti una muchacha buena, con valores, pero quizás demasiado ingenua que no se merece lo que estás sintiendo. Pero créeme que aquí el bien le ganó al mal. Presiento que de continuar con él, ibas a sufrir mucho más.

Busca relaciones que sean más reales, que no tengas que mantener a distancia, donde el roce diario te enseñe realmente con quién estás tratando.

Deja de sufrir porque a ti... no te echaron “brujería”.

Doctora Isabel

Mujer engañada

Doctora Isabel:

Necesito de su consejo. Mi esposo me engañó, y apenas me enteré por casualidad. Nosotros teníamos veinticuatro años de casados; él solamente me dijo que nuestra relación se terminó. Yo pregunté por qué, y me dijo solamente que ya estaba cansado de todo, inclusive de que siempre tenía que complacer. Yo no entendí y seguí preguntando, hasta que me dijo que tenía otra relación con una señora que vive en México, y la conoció por medio del Internet.

Yo ya sabía que tenía amigas en el Internet, porque él siempre me platicaba y me enseñaba sus correos, e inclusive lo que platicaba con ellas. Siempre me decía, prefiero hacerlo así, para no tenerlas cerca y así no tendría que salir de la casa, y no quiero tener problemas contigo. Yo lo entendí Doctora. Fue hace dos meses que él me dijo, necesito tomar unos días libres. Nosotros cuando llegamos aquí trabajamos mucho, sin descansos, inclusive los domingos trabajábamos. Tenía tres trabajos, cada uno era porque queríamos estar mejor, yo lo entendí. Pero cuál sería mi sorpresa que cuando le hablé para saber cómo estaba y si ya había llegado a su destino, lo escuché raro, y le pregunté si estaba solo y me dijo no, estoy con esa persona. Me dijo que estaba con ella y que la quería.

A partir de ese día mi mundo cambió. Yo era feliz, estaba siempre contenta porque nosotros teníamos una relación muy buena. Le perdí la confianza. Me dijo que ya tenían tres años de relación. No lo podía creer porque inclusive, en algunas ocasiones yo lo aprobaba cuando me decía que iba a hablar con su amiga. Ahora cuando él se fue de la casa me enteré que le compró el boleto de avión para que ella venga, y ya tienen un departamento.

Antes de que se fuera le hablé mucho pero me decía que está enfermo, que tiene que enfrentar este problema y que quería saber si funcionaba o no, y que no me quería seguir lastimando. Que me quiere mucho, pero no como yo quisiera. Por ese motivo le estoy pidiendo que me oriente. Estoy muy mal emocionalmente, porque la persona a la que le entregué todo mi amor y confianza me acaba de destrozar el corazón. Pero quiero seguir adelante, no quiero estar siempre triste.

Ayúdeme por favor; por cuestiones de mi trabajo no puedo escucharla siempre.

Estimada amiga:

Hay distintos tipos de amor, y el que ustedes tenían era disparejo. El camino a seguir para ti, es comprender que la pasión que quizás sintió por ti se terminó, que él no supo convertirla en ese amor tranquilo, de respeto, de cariño, de compromiso que las parejas forman cuando se ama de verdad. La definición tuya del matrimonio es diferente a la suya.

Creo que has sido muy comprensiva, como la esposa que ama, respeta y comprende. Pero ahora, comprende que no debe seguir contigo, que aunque regrese, nunca va a volver a ser igual. Van a existir dudas de tu parte y mucho dolor al verlo. Sepárate y déjalo ir. Sé que es muy difícil, y que por mucho tiempo estarás sufriendo como si fuera algo que murió. Y así es, se murió. Te recomiendo que busques refugio en programas que te ayuden a sanar tu dolor. Puedes ir a terapia, pero también hay grupos que te ayudarían a sentirte menos sola.

Date tu lugar, abraza tu dignidad de mujer que fue buena, y sigue siendo buena. No conviertas la puerta de tu casa en una puerta giratoria, donde cada vez que él se sienta culpable venga y te haga un favor para calmar su propio pesar.

Ahora es el momento de enseñarle que eres demasiada mujer para él. Vamos a ver cuánto tiempo la otra le da “más” como él dice. Por favor no lo esperes, no seas plato de segunda mesa.

Los programas de CoDA (Co-Dependents Anonymous) te pueden ayudar durante este proceso.

Tú tienes todo el poder de cambiar.

Doctora Isabel

Hombre engañado

Estimada doctora Isabel:

Tengo treinta y nueve años y siempre en lo que cabe he sido muy alegre, bastante feliz, hasta hace tres años que conocí a una persona y me gustó. Cometí el error de traerla de Cuba en un viaje que di. En la primera semana la descubrí en el Internet siéndome infiel hasta con mujeres y hablando de que logró su objetivo de venir y utilizarme.

Automáticamente la eliminé de mi vida. Mis sueños, con ella se me hicieron pedazos, a la vez que me he quedado por estos tres años muy mal de ánimo. Me he sentido engañado, usado, no he podido superar esto. Día a día me vienen a la mente pensamientos bien malos sobre esa persona. Me siento acomplejado, traicionado, usado con lo que me pasó. No he superado las cosas que me pasan por la mente hacia ella. Son bien feas, hasta de venganza. He tratado todo para levantar mi autoestima, haciendo ejercicios, yendo al gimnasio, pero no me ha ayudado. No me he recuperado, es algo que tengo bien metido dentro.

Me siento bien mal y a la vez no he podido encontrar a alguien. Necesito su consejo.

Estimado amigo:

Durante una visita no es tiempo suficiente para conocer a una persona. Esta experiencia quizás te ayude a aprender para la hora de tomar decisiones en el futuro, y tratar de que sean más sabias y mesuradas.

Pregúntate por qué fuiste a buscar a alguien geográfica y socialmente fuera de lo que conoces. Es posible que no confíes en las personas con las que te has rodeado en los Estados Unidos. ¿Qué es lo que realmente buscabas en Cuba? Estas preguntas te ayudarán a encontrar tu motivo, el más importante que tienes que mirar; el de ella, ya lo descubriste.

Sé que has tratado de calmar tus ansias y frustración asistiendo a un gimnasio, aunque es bueno para tu salud física y mental, no te ha ayudado lo suficiente. Llevas tres años cargando el peso de su engaño. Busca las razones en ti, no en ella. ¿Por qué creíste en ella? Si continuas esta búsqueda, te ayudará a destapar las verdaderas razones. ¿Es que fue el sexo, es que el sexo es mejor con una cubana? Me puedo dar la opción de hablar de esto, ya que nací en ese país, el cual no he pisado en cincuenta y dos años. No te concentres más en ella, no busques tanto pues, al igual que con el ejercicio, no te lleva a tu verdad.

Tienes que trabajar en ti, en realmente analizarte, y puntualizar qué es lo que quieres en tu vida. Y antes tendrás que hacer un inventario de los logros tuyos hasta ahora, y los que quisieras tener en el futuro. Analiza también cuáles han sido en tu vida tus fracasos y por qué han ocurrido. Haz tiempo para hacer un inventario de tu vida.

Los programas de CoDA (Co-Dependents Anonymous) localmente te podrían ayudar. Busca en Internet.

No busques tan lejos lo que tienes tan cerca. Encuéntrate a ti mismo.

Se tú el escritor del libreto de tu vida...

Doctora Isabel

Hombre divorciado dudoso de buscar un nuevo amor

Hola Dra. Isabel:

Un millón de bendiciones para ti. Me llamo Alejandro y soy un admirador tuyo de hace muchos años. Me separé de mi esposa; teníamos tres hijos juntos. Ella se enamoró de uno de mis amigos de la iglesia.

From the B&N Reads Blog

Customer Reviews